miércoles, 29 de julio de 2009

Se desinfla la opinión pública sobre Rosa Díez




Aunque la información que el CIS proporciona en sus barómetros, introduce claros sesgos favorables al Gobierno del PSOE y en contra de los demás partidos, y se encuentra cuestionada, incluso por la UPyD, hay algunos datos que sin duda pueden considerarse relevantes, en lo que se refiere al partido de Rosa Díez.

En los últimos cinco barómetros en los que se tiene en consideración la UPyD, se puede comprobar que la evolución en la estimación de voto para este partido durante el último año ha sido la siguiente:

julio 2008: 2,5 %
octubre 2008: 2,9 %
enero 2009: 3,1 %
abril 2009: 2,9 %
julio 2009: 3,2 %

En el caso de valoración del apoyo de su líder, Rosa Díez, sólo se ha recogido en tres ocasiones a lo largo de 2009 en lugar de las cinco en lo que se ha hecho con el partido que dirige:

Enero 2009: 4,43
Abril 2008: 4,28
Julio 2009: 4,12


Si bien se observa que a fecha actual, la UPyD obtiene su mejor resultado en estimación de voto, aunque con un crecimiento de sólo una décima desde enero de 2009 hasta la fecha actual, a pesar de la presencia que ha tenido en las elecciones gallegas, vascas (1 diputado) y europeas (1 diputado) no se puede decir lo mismo de la valoración de su líder, Rosa Díez, que obtiene la peor nota de valoración a lo largo del presente año.

Posiblemente el desgaste, que afecta más a Rosa Díez que a su partido, se explique por los problemas que se han visto en las últimas semanas en el seno de su formación política, como recientemente exponía Gerardo Hernández Les, uno de los críticos que han formado el grupo de estanoeslawebdeupyd: el partido se ha apoyado demasiado en Rosa Díez.

El margen de crecimiento de UPyD se ha quebrado, porque desde octubre de 2008 se ha estancado en una franja entre 2,9 y 3,2, que es el techo electoral que se estima para UPyD, algo que acompaña al descenso de valoración mantenido de Rosa Díez, lo que se puede considerar como una crisis de liderazgo, que se suma a la crisis interna que está sufriendo la UPyD, al conformarse como un partido jerárquico y vertical, del que se han descolgado las opciones que apostaban claramente por la transversalidad.

En octubre de 2009, el CIS nos hará una nueva entrega de su barómetro político, en el probablemente las cifras decaerán tanto en el apoyo declarado a UPyD como a Rosa Díez, si así ocurre, asistiremos a un fenómeno singular, que será que todo lo que se ha hecho arbitrariamente contra sus compañeros por los dirigentes de la formación magenta, comenzará a pasar factura electoral, añadiéndose a los demás síntomas de que no se están haciendo bien las cosas en la organización del partido, lo que se acumulará a las críticas que se han venido haciendo tanto desde las corrientes existentes en el partido, como desde los representantes políticos de UPyD que han sido expedientados y expulsados, como desde los militantes de base que no ocupaban ningún cargo representativo.

Mientras se crecía nadie decía nada, unos porque esperaban algo, otros porque esperaban que las cosas se arreglaran, otros porque no se han enterado realmente de lo que está ocurriendo, pero ahora que no se crece y que Rosa Díez mengua en sus apoyos, ya no se puede continuar con la dialéctica oficial de que UPyD es Rosa Díez y nada más.

Ahora el partido se la juega, porque si no logra demostrar a los ciudadanos de este país que es algo más que Rosa Díez y su corte de dirigentes designados, su descalabro va a ser impresionante. Ahora que el partido necesita a los que tienen criterios propios para demostrar que UPyD no se limita exclusivamente a Rosa Díez, nos encontramos con que los únicos que quedan en el partido son los palmeros edecanes que la divina progresista ha establecido como su oligárquico cinturón de hierro, que además ha establecido una dictadura férrea en la que tener criterio propio y exponerlo públicamente puede conducir directamente al expediente-expulsión del partido.

Mira que esta berenjena lo advirtió en su día, pero ni caso, ni el mejor de los generales puede guiar a la tropa si no tiene una estructura de mando intermedio que funcione con criterio propio, ahora por mucho que insistan en que no ocurre nada, lo único que pueden hacer es ascender a oficiales a los soldados, o fichar mercenarios para que dirijan la organización del partido, ninguna de las alternativas será buena, y desde luego mucho peor que la que hubiera correspondido a una situación óptima si los liderazgos naturales –fundamentados en el mérito- en el partido no se hubieran castrado, por miedo a que desplazaran a los que ya se habían acomodado en la poltrona, sin haber hecho otro mérito, que bailarle el agua a Rosa Díez, sin suponer ningún peligro para los cortesanos jerarquizados que estaban dispuestos a que en UPyD no hubiera más poder y criterio que el suyo, aunque no fuera el mejor de los posibles.

Aquí tenemos un ejemplo palmario de lo que algunos se han atrevido a calificar como
selección negativa, viendo pajas en ojos ajenos, mientras las vigas en los propios les pasaban desapercibidas.

sábado, 25 de julio de 2009

Ampliación de Tucídides


El mayor problema de la cultura es que no la regalan con las tapas de los yogures; por eso, para citar a los clásicos también hay que saber lo que se cita, sino pasan cosas como esta

Fragmento de la Oración Fúnebre de Tucídides en el que nos habla de la democracia, "demos-kratos" (δεμοσκρατοσ; demos = pueblo, kratos = gobierno), gobierno del pueblo. A ver si la Divina Progresista continúa con la pedagogía... y nos sigue explicando de que va la cosa del régimen autoritario y totalitario, envuelto en palabras de generosidad política, que se ha montado con los colegas más próximos...
Tenemos un régimen político que no se propone como modelo las leyes de los vecinos, sino que más bien es él modelo para otros. Y su nombre, como las cosas dependen no de una minoría, sino de la mayoría, es Democracia. A todo el mundo asiste, de acuerdo con nuestras leyes, la igualdad de derechos en los conflictos privados, mientras que para los honores, si se hace distinción en algún campo, no es la pertenencia a una categoría, sino el mérito lo que hace acceder a ellos; a la inversa, la pobreza no tiene como efecto que un hombre, siendo capaz de rendir servicio al Estado, se vea impedido de hacerlo por la oscuridad de su condición. Gobernamos liberalmente lo relativo a la comunidad, y respecto a la suspicacia recíproca referente a las cuestiones de cada día, ni sentimos envidia del vecino si hace algo por placer, ni añadimos nuevas molestias, que aun no siendo penosas son lamentables de ver. Y al tratar los asuntos privados sin molestarnos, tampoco transgredimos los asuntos públicos, más que nada por miedo, y por obediencia a los que en cada ocasión desempeñan cargos públicos y a las leyes, y de entre ellas sobre todo a las que están dadas en pro de los injustamente tratados, y a cuantas por ser leyes no escritas comportan una vergüenza reconocida.

Y más adelante Tucídides continúa
Resumiendo, afirmo que la ciudad toda es escuela de Grecia, y me parece que cada ciudadano de entre nosotros podría procurarse en los más variados aspectos una vida completísima con la mayor flexibilidad y encanto. Y que estas cosas no son jactancia retórica del momento actual sino la verdad de los hechos, lo demuestra el poderío de la ciudad, el cual hemos conseguido a partir de este carácter. Efectivamente, es la única ciudad de las actuales que acude a una prueba mayor que su fama, y la única que no provoca en el enemigo que la ataca indignación por lo que sufre, ni reproches en los súbditos, en la idea de que no son gobernados por gentes dignas. Y al habernos procurado un poderío con pruebas más que evidentes y no sin testigos, daremos ocasión de ser admirados a los hombres de ahora y a los venideros, sin necesitar para nada el elogio de Homero ni de ningún otro que nos deleitará de momento con palabras halagadoras, aunque la verdad irá a desmentir su concepción de los hechos; sino que tras haber obligado a todas las tierras y mares a ser accesibles a nuestro arrojo, por todas partes hemos contribuido a fundar recuerdos imperecederos para bien o para mal. Así pues, éstos, considerando justo no ser privados de una tal ciudad, lucharon y murieron noblemente, y es natural que cualquiera de los supervivientes quiera esforzarse en su defensa.

Esta es la razón por la que me he extendido en lo referente a la ciudad enseñándoles que no disputamos por lo mismo nosotros y quienes no poseen nada de todo esto, y dejando en claro al mismo tiempo con pruebas ejemplares el público elogio sobre quienes ahora hablo. Y de él ya está dicha la parte más importante. Pues las virtudes que en la ciudad he elogiado no son otras que aquellas con que las han adornado estos hombres y otros semejantes, y no son muchos los griegos cuya fama, como la de éstos, sea pareja a lo que hicieron. Y me parece que pone de manifiesto la valía de un hombre, el desenlace que éstos ahora han tenido, al principio sólo mediante indicios, pero luego confirmándola al final. Pues es justo que a quienes son inferiores en otros aspectos se les valore en primer lugar su valentía en defensa de la patria, ya que borrando con lo bueno lo malo reportaron mayor beneficio a la comunidad que lo que la perjudicaron como simples particulares. Y de ellos ninguno flojeó por anteponer el disfrute continuado de la riqueza, ni demoró el peligro por la esperanza de que escapando algún día de su pobreza podría enriquecerse. Por el contrario, consideraron más deseable que todo esto el castigo de los enemigos, y estimando además que éste era el más bello de los riesgos decidieron con él vengar a los enemigos, optando por los peligros, confiando a la esperanza lo incierto de su éxito, estimando digno tener confianza en sí mismos de hecho ante lo que ya tenían ante su vista. Y en ese momento consideraron en más el defenderse y sufrir, que ceder y salvarse; evitaron una fama vergonzosa, y aguantaron el peligro de la acción al precio de sus vidas, y en breve instante de su Fortuna, en el esplendor mismo de su fama más que de su miedo, fenecieron.
Cualquier parecido con el partido magenta, la UPyD, es exclusivamente producto de su fantasía...la tomadura de pelo pública debería ser delito. Otro ejemplo de como Rosa Díez utiliza los símbolos de la democracia para implantar en su partido un régimen autoritario, totalitario, y cutre. No son las palabras las que definen a un actor político, sino sus HECHOS ACONTECIDOS, HECHOS que ha permitido, HECHOS que posiblemente ha urdido Rosa Díez, con conocimiento, premeditación y alevosía, como hoy denuncia Mikel Buesa, el número dos, en el final de su pentateuco "Adios Muchachos" donde nos ha relatado las "crónicas de Babia" con magistral desenvoltura. Rosa Díez esa émula de Zelaya, el presidente hondureño que quería imponer en su país una dictadura bolivariana y ha salido escaldado, con el rabo entre las piernas. Va siendo hora de recoger firmas entre los militantes de UPyD para pedir la destitución de Rosa Díez y su platajunta no democrática, antes de llegar al congreso de noviembre, ya se tarda demasiado.

Oración Fúnebre de Pericles, por Tucídides

jueves, 23 de julio de 2009

UPyD no es un partido político democrático: demostración irrefutable

En estos momentos hay un debate interesante en la red sobre si el Partido de Rosa Díez cumple los criterios mínimos para considerarse una formación democrática. Sus defensores dicen que sí, mientras sostienen el paraguas magenta ante las críticas de los encorajinados detractores que se sienten defraudados y que consideran que han sido víctimas de malos tratos políticos, por parte de los dirigentes de la formación magenta, y que se decantan por lo contrario. En mi criterio, UPyD dista mucho de ser una formación democrática. Veamos quien tiene razón.

Robert A. Dahl, en “Justificación de la Democracia” considera determinadas características intrínsecas en las formaciones políticas para que puedan ser consideradas democráticas, más allá de la propaganda que enarbolan sus dirigentes para acallar las críticas.

En cuanto a los criterios internos se puede decir lo siguiente

La democracia en un escenario político debe fundamentarse para Dahl en un principio de fuerte igualdad, que consiste en la “igualdad en el valor intrínseco”. Esta idea advierte que
“ninguna persona es intrínsecamente superior a otra y que los intereses de cada ser humano tienen derecho a igual consideración”. “Todos cuentan por uno, nadie por más de uno”, declaraba Bentham.

Evidentemente, a la vista de lo acontecido, en UPyD este principio fundamental no se ha respetado, porque los miembros del partido se han distinguido en dos clases los dirigentes designados por Rosa Díez y los dirigidos, también designados por los dirigentes, cada uno con diferentes derechos y deberes, por la designación de Rosa Díez y los dirigentes,
no por su valor intrínseco. Esto nada tiene que ver con la democracia, sino más bien con el despotismo.

Tras cumplirse el criterio de igualdad intrínseca, que no se cumple en UPyD, Dahl nos ofrece otras condiciones como son: la participación efectiva, la igualdad de voto, para alcanzar una comprensión ilustrada de lo que está en juego, para ejercitar el control final sobre la agenda y además debe ser inclusiva de todos los ciudadanos adultos. Evidentemente estos criterios tampoco se han cumplido en UPyD, al contrario, la agenda ha sido determinada por la dirección del partido, con la ratificación del consejo político del que se han apartado más del 80 % de los miembros fundadores, precisamente por la actitud caciquil ejercida por Rosa Díez y sus acólitos designados. Esto ha sido denunciado por numerosos militantes del partido que lo han abandonado ante la ausencia de democracia interna y respeto por las personas que se han atrevido a cuestionar la versión oficial de la realidad, la única posible en el partido.

Por último, para que una democracia pueda considerarse representativa, debe cumplir al menos ocho criterios que se refieren a continuación:

1) Libertad de asociación: la organización de una candidatura alternativa a la oficial por los participantes en la página estanoeslawebdeupyd ha sido motivo de expediente que anticipa la expulsión de los componentes de la misma.

2) Libertad de expresión: al postulante de las listas abiertas en el Consejo Político en el que se dictaminó sobre las mismas se le ha abierto expediente, como anticipo de su futura expulsión. Los que han dicho han expresado libremente su opinión han sido ya expulsados.

3) Libertad de voto: los militantes de UPyD han tenido que asumir dos años de carencia democrática, para que los dirigentes del partido pudieran organizar –tras la depuración correspondiente de los discrepantes- el congreso a la medida de sus intereses. No se puede votar en plenitud porque no se han admitido las listas abiertas, con lo que se impide que Rosa Díez pueda salir elegida como máximo dirigente del partido con una ejecutiva que no sea la de sus palmeros, se han invertido los términos de la democracia, es la dirigente la que elige con quienes va, no los militantes, los que eligen quien la acompaña.

4) Elegilibilidad para el servicio público: serán los dirigentes quienes elegirán a quienes les representarán como concejales o diputados, no los militantes. Al igual que en el resto de partidos políticos.

5) Derecho de los líderes políticos a competir por el voto: evidentemente este derecho ha sido conculcado desde el momento de que todos los dirigentes de UPyD han sido designados por la dirección del partido. En las escasas ocasiones en que los militantes se habían puesto de acuerdo para elegir entre ellos a su coordinador, como en Galicia, los dirigentes del partido lo han impedido y han expedientado a los demócratas.

6) Elecciones libres e imparciales: en ningún caso se han celebrado en el partido elecciones libres e imparciales, al contrario, la democracia se ha subyugado siempre a las decisiones de los dirigentes, aún en contra de las votaciones de los militantes.

7) Garantía institucional de la democracia: evidentemente lo que se ha producido en el partido de Rosa Díez, ha sido precisamente lo contrario, la garantía institucional de que no podía haber democracia.

8) Diversidad de las fuentes de información: en ningún caso ha habido en el partido información oficial que no haya sido sugerida, controlada y aprobada previamente por la cúpula dirigente, lo que ha tenido como consecuencia que fuera del partido se haya producido toda la información que no era posible dentro del mismo.

En cuanto a los
criterios externos, sobre las condiciones democrática en el Partido de Rosa Díez, en el Estado de Derecho español vienen determinados por ley en dos ámbitos concretos, la Constitución Española y la Ley de Partidos

Como todo el mundo sabe, el partido de Rosa Díez piensa celebrar su primer congreso en noviembre de 2009, en esa fecha llevará dos años vulnerando la Constitución Española y la Ley de Partidos, dos años de carencia democrática en los que su partido se ha presentado a elecciones, ha recibido fondos públicos como si fuera una formación legítima y legal, se han cometido auténticas tropelías de forma arbitraria e ilegal contra los militantes y se ha asfixiado a las voces críticas de forma despótica

La Constitución Española en su artículo 6

Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política. Su creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la Ley. Su estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos.

Y numerosos artículos correspondientes a los derechos fundamentales de los ciudadanos que han sido conculcados.

La Ley de Partidos Políticos

Artículo 6. Principios democrático y de legalidad.

Los partidos políticos se ajustarán en su organización, funcionamiento y actividad a los principios democráticos y a lo dispuesto en la Constitución y en las leyes.

Artículo 7. Organización y funcionamiento.

1. La estructura interna y el funcionamiento de los partidos políticos deberán ser democráticos.
2. Sin perjuicio de su capacidad organizativa interna, los partidos deberán tener una asamblea general del conjunto de sus miembros, que podrán actuar directamente o por medio de compromisarios, y a la que corresponderá, en todo caso, en cuanto órgano superior de gobierno del partido, la adopción de los acuerdos más importantes del mismo, incluida su disolución.
3. Los órganos directivos de los partidos se determinarán en los estatutos y deberán ser provistos mediante sufragio libre y secreto.
4. Los estatutos o los reglamentos internos que los desarrollen, deberán fijar para los órganos colegiados un plazo de convocatoria suficiente de las reuniones para preparar los asuntos a debate, el número de miembros requerido para la inclusión de asuntos en el orden del día, unas reglas de deliberación que permitan el contraste de pareceres y la mayoría requerida para la adopción de acuerdos. Esta última será, por regla general, la mayoría simple de presentes o representados.
5. Los estatutos deberán prever, asimismo, procedimientos de control democrático de los dirigentes elegidos.

Artículo 8. Derechos y deberes de los afiliados.


1. Los miembros de los partidos políticos deben ser personas físicas, mayores de edad, y no tener limitada ni restringida su capacidad de obrar. Todos tendrán iguales derechos y deberes.
2. Los estatutos contendrán una relación detallada de los derechos de los afiliados, incluyendo, en todo caso, los siguientes:
a. A participar en las actividades del partido y en los órganos de gobierno y representación, a ejercer el derecho de voto, así como asistir a la Asamblea general, de acuerdo con los estatutos.
b. A ser electores y elegibles para los cargos del mismo.
c. A ser informados acerca de la composición de los órganos directivos y de administración o sobre las decisiones adoptadas por los órganos directivos, sobre las actividades realizadas y sobre la situación económica.
d. A impugnar los acuerdos de los órganos del partido que estimen contrarios a la Ley o a los estatutos.
3. La expulsión y el resto de medidas sancionadoras que impliquen privación de derechos a los afiliados sólo podrán imponerse mediante procedimientos contradictorios, en los que se garantice a los afectados el derecho a ser informados de los hechos que den lugar a tales medidas, el derecho a ser oídos con carácter previo a la adopción de las mismas, el derecho a que el acuerdo que imponga una sanción sea motivado, y el derecho a formular, en su caso, recurso interno.
4. Los afiliados a un partido político cumplirán las obligaciones que resulten de las disposiciones estatutarias y, en todo caso, las siguientes:
a. Compartir las finalidades del partido y colaborar para la consecución de las mismas.
b. Respetar lo dispuesto en los estatutos y en las leyes.
c. Acatar y cumplir los acuerdos válidamente adoptados por los órganos directivos del partido.
d. Abonar las cuotas y otras aportaciones que, con arreglo a los estatutos, puedan corresponder a cada uno.


Artículo 9. Actividad.


1. Los partidos políticos ejercerán libremente sus actividades. Deberán respetar en las mismas los valores constitucionales, expresados en los principios democráticos y en los derechos humanos. Desarrollarán las funciones que constitucionalmente se les atribuyen de forma democrática y con pleno respeto al pluralismo.

2. Un partido político será declarado ilegal cuando su actividad vulnere los principios democráticos, particularmente cuando con la misma persiga deteriorar o destruir el régimen de libertades o imposibilitar o eliminar el sistema democrático, mediante alguna de las siguientes conductas, realizadas de forma reiterada y grave:
a. Vulnerar sistemáticamente las libertades y derechos fundamentales,

promoviendo, justificando o exculpando los atentados contra la vida o la integridad de las personas, o la exclusión o persecución de personas por razón de su ideología, religión o creencias, nacionalidad, raza, sexo u orientación sexual.

b. Fomentar, propiciar o legitimar la violencia como método para la consecución de objetivos políticos o para hacer desaparecer las condiciones precisas para el ejercicio de la democracia, del pluralismo y de las libertades políticas.

Con lo que queda demostrado de forma fehaciente que el partido de Rosa Díez, la UPyD no es una formación política democrática y por lo tanto es una organización política ilegítima e ilegal, en la que se han cometido delitos contra los derechos fundamentales de los españoles que se han asociado a la misma pensando que se adherían a una formación política democrática y legal, que se ha demostrado con los hechos ocurridos que no lo es, y en la que se han aplicado códigos de sanción arbitrarios, que no se soportan sobre la legalidad vigente.

De lo que se deduce que sus dirigentes son unos presuntos delincuentes que se han organizado con la única finalidad de crear una asociación de aspecto político, con el envoltorio de una supuesta legalidad, que les ha permitido actuar de forma ilegítima, actuando contra la dignidad de las personas de forma sectaria, y obteniendo recursos económicos de los militantes y del Estado, sin cumplir los criterios legales requeridos por la legislación española en el seno de su formación -que se han expuesto con anterioridad-, por lo que no se descarta que hayan cometido y estén cometiendo un delito continuado de engaño público próximo a la consideración de estafa.

Esta es la auténtica realidad de UPyD.

miércoles, 22 de julio de 2009

La sonrisa magenta 5


UPyD y la Regeneración Democrática


“Cinco puntos, cinco son, ni uno menos, ni uno más, si quieren me los aceptan y si no chirrín, chirrán”, con esta entrañable melodía, Carlos Puebla nos anunciaba la Revolución Cubana allá por los años sesenta, cincuenta y cinco años después sabemos que los cinco puntos eran de sutura en la boca de los cubanos, una sutil mordaza para que el régimen de Fidel Castro siga vigente como un vestigio del Jurásico.

El Programa Electoral de UPyD en 2008, que se puede leer en la página del partido –todavía-, que permitió a Rosa Díez alcanzar su acta de diputado por la comunidad de Madrid, también constaba de 5 líneas de actuación, que anticipaba de la siguiente forma:

1 - Unión Progreso y Democracia es, ante todo y sobre todo, un partido democrático. Por ello la prioridad absoluta de su propuesta a la ciudadanía española es el fortalecimiento de nuestra democracia...

Sólo una fuerza política nueva que haga de la regeneración democrática una prioridad puede posibilitar las reformas que permitan superar los déficits democráticos de nuestro sistema político.

Para proseguir con un diagnóstico que decía:

4 - La soberanía reside en los ciudadanos. Los partidos políticos deben ser instrumentos que hagan posible la participación ciudadana en los asuntos públicos. La regeneración democrática tendrá como uno de sus objetivos devolver a la ciudadanía parte del poder ahora detentado por las burocracias de los partidos y garantizar que el voto de todos los ciudadanos tenga el mismo valor.

Entre las propuestas figuraban las siguientes

9 a) - La implantación de sistemas electorales de listas abiertas y/o desbloqueadas que refuercen la autonomía de los parlamentarios respecto a las burocracias de los partidos.

15 - Democratización interna de los partidos, instaurando la obligatoriedad de la elección directa por los afiliados, o elecciones primarias, de los candidatos a los principales puestos de responsabilidad política. Asimismo se reforzará la protección judicial de los afiliados frente a expulsiones arbitrarias.

A la vista de lo acontecido en los dos últimos meses,
Rosa Díez ha incumplido su programa electoral en relación a los argumentos ofrecidos que le hicieron obtener su acta de diputado, por lo tanto, Rosa Díez ha mentido, se puede comprobar que no se ha cumplido en su propio partido lo que anunciaba para obtener su acta de diputado. Esto es algo muy grave.

Aunque esta es una práctica habitual en la política española, ofrecer cosas a los ciudadanos para salir elegido en las urnas, que luego no se cumplen, no pienso que Rosa Díez haya participado del engaño que se ha organizado en su partido, posiblemente debido a una mala interpretación por parte de los dirigentes designados que no han sabido comprender lo que realmente era la Regeneración Democrática, e interpretar lo que realmente quería decir Rosa Díez; aunque como máxima dirigente del partido no puede ser ajena a las consecuencias que se han derivado de este error y por lo tanto, responsable de una negligencia imperdonable que ha puesto en precario el porvenir de la formación magenta.

Esto contradice su trayectoria democrática, algo que puede hacerle mucho daño a la formación magenta, que como Rosa Díez ha argumentado recientemente, es mucho más que ella, por eso quiero hacer una propuesta, a instancias de algunos militantes que han escrito a esta berenjena solicitándole que su discurso sea más positivo y constructivo.

Para salvaguardar el buen nombre de la formación magenta, creo que Rosa Díez debe dimitir como diputado, y dejar que Mikel Buesa ocupe su lugar, sólo de esta forma quedará eximida de cualquier responsabilidad en el engaño que se ha cometido y de esta forma se podrá comprobar que UPyD es un partido diferente que realmente apuesta por la Regeneración Democrática.

Si no lo hace, los ciudadanos podrán decir que Rosa Díez y su partido, la UPyD les han engañado para obtener su acta de diputado, porque no ha cumplido su programa en cuanto a las ofertas de Regeneración Democrática que había hecho para lograrla. Esto conducirá a la decadencia de UPyD, algo que este país no se puede permitir. En el sacrificio personal y la generosidad por el bien colectivo es donde se conoce la grandeza de los auténticos líderes políticos.

Esta berenjena está esperando anhelante que Rosa Díez le demuestre que se equivoca al pensar que pondrá por delante su acta de diputado que el porvenir de su partido y la regeneración democrática que ha anunciado, que ella es capaz de cualquier cosa por el bien de su partido, la UPyD, y la regeneración democrática en este país.

Tras darle muchas vueltas a la cuestión, creo que es la única forma de arreglar el estropicio.

lunes, 20 de julio de 2009

Que no cunda la tristeza

He recorrido la red para contemplar como ha quedado el campo de batalla virtual tras la contienda entre los discípulos de Gatokan y las fuerzas rebeldes y dispersas que se han enfrentado a su tiranía; la escena configura un auténtico desastre para el presente y futuro de la formación magenta, no solo por las críticas enfurecidas de los atribulados defraudados, sino por el escaso apoyo de los más leales seguidores de la consigna: “los dirigentes designados son los que mandan, los demás militantes sólo pueden obedecer”.

Ahorraré ejemplos, pero contemplar el silencio de los blogueros que hace dos meses se oponían a cualquier crítica al partido magenta, nos informa mucho mejor de la situación en la que se encuentra el partido de Rosa Díez, que las críticas descarnadas al clima de despotismo ignorante en el que han sucedido los hechos.

Se aprecia que la UPyD está muy tocada, encarando su no lejano hundimiento definitivo, con el silencio que delata que la mayoría de las cosas que se han dicho, por extravagantes que resulten, son ciertas. Ni Rosa Díez, ni Gorriarán las han desmentido, sencillamente han dado una versión alternativa de lo acontecido y se han ido a la playa, posiblemente buscando la patera en la que han llegado a la política española, para regresar directamente al olvido.

UPyD tiene menos futuro que un salmonete en una parrilla. Cierto es que se merecen lo ocurrido, por demagogos e insolentes, por estafadores políticos, por sinvergüenzas que no han dudado en depurar de su partido a todos los que se oponían a su férrea dictadura. Lo hicieron con absoluta discreción, hasta que las linternas de la libertad iluminaron la caverna cochambrosa hasta la que habían conducido a sus seguidores.

Es cierto que la política española no está para finas filigranas de orfebrería estratégica, pero la imposición de una tiranía de una forma tan burda, torpe y sórdida, pensando que podía pasar desapercibida, es propia de individuos sin escrúpulos que desprecian a sus semejantes.

La operación de regeneración del socialismo español que era la alternativa que se ocultaba bajo el manto patriótico de Rosa Díez y el palio de la transversalidad política, ha fracasado; a pesar de los apoyos mediáticos recibidos de furibundos detractores de las andanzas de Rodríguez Zapatero, a pesar de los valientes apoyos electorales de los que están más hartos de Rajoy y Zapatero, al mismo tiempo, a pesar de la confianza expresada por los militantes ilusionados con un proyecto que parecía novedoso.

Ahora, las palabras de Rosa Díez sonarán con la misma estridencia inhumana que las de un distribuidor de carburante que nos da las gracias tras echar gasolina.

Todavía se piensan los ilusos dirigentes de UPyD, mientras preparan sus cuitas futuribles, que la población no se enterará de lo ocurrido en internet, el lugar donde se ha desarrollado la confrontación entre los tiranos disfrazados de demócratas y los demócratas sin disfraz, que tremenda ingenuidad.

La cuota de ciudadanos españoles que pueden ser engañados por UPyD se ha dividido por cien. Siguen sin darse cuenta de que el problema no es quien les ha criticado con razón, sino quien se va a atrever a defender las propuestas de Rosa Díez a partir de ahora, que está condenada a que sus palabras, cuanto más acertadas sean, más ridículas quedarán ante la opinión pública, porque no faltará periodista profesional o voluntario que le diga aquello de: ¿pero cómo va a lograr para este país lo que no ha sido capaz de conceder en su propio partido?. No nos tome el pelo, Doña Rosa, que ya vamos siendo mayores, usted es una vulgar demagoga.

El final político de Rosa Díez está asegurado, será tras su regreso de la playa, cuando el tsunami informativo arrase con todo lo que había soñado, asistiremos a un espectáculo viendo como trata de ocultar la verdad de los hechos con las mentiras de sus palabras. El congreso de noviembre será el cenotafio de UPyD. Hasta entonces, hay que seguir remando para que parezca que no ocurre nada.

domingo, 19 de julio de 2009

Lo político también es humano, no puede no serlo

La crisis es humana, no política. Que la enfermedad del niño es un sarampión, no una malformación congénita irreversible. Que las críticas de falta de democracia son groseras; que no se qué de la dirección del partido que se está partiendo el cobre, como los mineros chilenos, faltó añadir. Que es una ofensa decir a esas personas que lo que hacen no es democrático, que lo que ocurre no está afectando al crecimiento del partido, y algunas otras cosas sobre lo mucho que aprecia a Mikel Buesa, que ha debido ser “la caló” el motivo de sus declaraciones, y que por supuesto, no hay ninguna duda de que UPyD no acabará como Ciudadanos.

¿Y por qué dice todas estas cosas Rosa Díez si realmente no pasa nada?. Es que no encaja, si no pasa nada, se dice que no pasa nada, no que pasa algo pero que en realidad no es nada, lo que demuestra que pasa algo, y ahora viene la interpretación, “es una crisis humana, no política”.

Claro, el problema entonces son los seres humanos que no saben estar en política, que no encajan en los planes que Rosa Díez tiene en su cabeza para los seres humanos, la única política que sabe lo que hay que hacer, como atajar “ese algo que ocurre”. De lo que se deduce, sin ser muy ágil de neuronas, que para Rosa Díez, por un lado van los seres humanos y por otro la política. Es decir, hay que salvar la política antes que los seres humanos, el Titanic, antes que los pasajeros; ¿pero entonces?, ¿a qué conclusión llegamos?. Rosa Díez establece una contradicción entre lo humano y lo político, y por supuesto se decanta por lo político antes que por los seres humanos, esos “errores”.

Es decir, el programa de Rosa Díez diferencia humano de político, lo político está por encima de lo humano, por lo tanto se puede sacrificar a los seres humanos (un medio), para conseguir algo político (un fin). Así se retrata Rosa Díez, y cuanto más hable, más retratos que nos mostrarán su auténtica faz, de ausencia de respeto por los seres humanos, y no la que se muestra en los telediarios de luchadora por los derechos y las libertades de los seres humanos, pura propaganda para lograr sus fines políticos.

Así que la crisis es humana, no política. Claro, la política es una característica que nada tiene que ver con los seres humanos, política para los seres humanos pero sin los seres humanos, como la de Fidel Castro, Hitler, o Stalin, que también consideraban que una cosa era la política y otra cosa que nada tenía que ver, lo humano. Fascinante esperpento en pleno siglo XXI, en un país medianamente avanzado, que recuerda a las proezas de los faraones, los emperadores romanos y los monarcas absolutistas de la Edad Media, aquellos que actuaban como déspotas.

sábado, 18 de julio de 2009

¿Merece la pena?

Discurso de presentación de UPyD por Rosa Díez. Hoy, quince meses después, sabemos que Rosa Díez denuncia lo mismo que ella hace.

¿Creen ustedes que "merece la pena"?.










Encontrar las 1.000 diferencias entre lo que se dice y lo que se hace.... Vean lo que se dice sobre los partidos políticos y cotejen lo que dice, con lo que hace en el suyo.

viernes, 17 de julio de 2009

Quería decírtelo


Han cerrado por vacaciones los blogs de Rosa Díez y Gorriarán, más bien ha sido porque han perdido la primera batalla por el control del partido magenta, en consecuencia han izado el puente levadizo, cerrado las puertas de la fortaleza y han desaparecido del combate que se desarrolla ante la opinión pública. Algún espabilado de esos que rodean y aplauden a la Divina Progresista, habrá tenido la ocurrencia que muestra la ausencia de argumentos para justificar lo ocurrido. Han pensado que como estamos en verano, la presión crítica cesará y se disipara llegado septiembre.

Craso error, se confirma que no tienen pajolera idea en lo que andan metidos. Su silencio, es el mismo a que nos tienen acostumbrados Rodríguez Zapatero y el PSOE, los sindicatos de clase, y la corte parafernalia que les acompaña en las manifestaciones del nunca mais o la oposición a la guerra de Irak. Así aún se retratan más.

El efecto será precisamente el contrario, en un verano en el que nadie quiere hablar de la crisis económica, social y política que estamos viviendo en España, UPyD se va a convertir en la panacea de los periodistas. El silencio oficial se suplirá con la protesta crítica. Las afrentas cometidas contra los militantes se irán desgranando poco a poco, hasta conformar un escenario desfavorable para las ilusiones de los dirigentes designados. Será lluvia fina informativa que terminará anegando la formación magenta. En el otoño, UPyD se habrá quedado en el mismo rango que Ciudadanos, aunque por otros motivos, su evolución repite las etapas del declive y descalabro del partido no nacionalista catalán. En las próximas encuestas se podrá ver que ni Rosa Díez es la figura política mejor valorada y los votos de las europeas se habrán reducido a la mitad de los obtenidos.

Los españoles que han decidido apoyar a Rosa Díez, se están dando cuenta ahora mismo que su partido es una imitación mala y chapucera de los grandes partidos políticos españoles, no la novedad que se anunciaba. La UPyD ha perdido la coherencia en tan sólo un mes, porque hoy no puede sostener siquiera el Manifiesto Fundacional de su partido, que se ha quedado en papel mojado, pueden comprobarlo.

El partido magenta sufre una epidemia de libertad, que los opresores no saben, ni pueden atajar. Sin democracia, sin libertad, sin justicia, sin respeto a los militantes y sin pluralidad, la UPyD se ha convertido en el mejor ejemplo de una secta perniciosa para la política española. Nada que ver con un proyecto político novedoso.

Haciendo una lectura retrospectiva de las intervenciones públicas de Rosa Díez, no resulta difícil comprender, que lo ocurrido no ha sido accidental, sino urdido por la Divina Progresista, Gatokan, y sus fieles, para hacerse con el control pleno del partido, los mensajes emocionales eran pura propaganda, la afiliación de militantes una estrategia para que Rosa Díez llegara al micrófono, desde su pequeñez intelectual, que suple con un desparpajo verdulero; ahora que ha alcanzado el micrófono que le permite vender su proyecto, le sobran los militantes, sobre todo si cuestionan su forma de actuar desde la más mínima crítica.

La estrategia de la Divina Progresista ha estado en su cabeza desde el principio, cuando se disolvió Basta Ya, y se fundamenta en convertirse en un complemento del PSOE y del PP; del PSOE para servir de castigo a la política pronacionalista de Rodríguez Zapatero, defendiendo las posiciones históricas del socialismo español; del PP, para suplir la errática deriva del vuelo de la gaviota con un discurso definido sobre la unidad del Estado. Sabemos que la idea de España, es decir, la nación española, se la sopla a Savater y a todos los seguidores del club magenta.

Regreso al pasado es lo que ofrece el Partido de Rosa Díez, nada que ver con el progreso. Por eso ha colocado en las coordinadoras más importantes como Madrid y Barcelona a antiguos miembros del PSOE, expulsados por no compartir las tesis nacionalistas de su partido, junto con alguno más errabundo que perteneció a la Unión Comunista Española, aderezado con los trepas característicos que se llevan preparando desde hace años para su salto a la política, entre los que hay algunos representantes de la Universidad española, siempre adheridos a postulados de la izquierda política.

Sin duda la auténtica apuesta por la transversalidad de UPyD estaba en los que se han ido, porque los que se han quedado, en las condiciones que se han impuesto en el partido, más bien entrarían en la categoría de secta. Se han ido o se han echado, a los pocos liberales que había en la formación magenta, junto con los socialistas honestos que apostaban realmente por la transversalidad, a los que se añaden los no adscritos que acudieron a la llamada de la regeneración democrática, la defensa de la Constitución y la denuncia de lo existente. Todos los que se han ido han puesto sus principios por delante de sus beneficios, entre ellos más del 80 % del consejo político fundador, que ahora podrían tener el detalle de relatar su experiencia, porque tras cada acto arbitrario, “por el bien del partido”, se ocultan comportamientos ignominiosos, ilegítimos, auténticas barbaridades que vulneran la Ley de Partidos y la Constitución Española, y los derechos fundamentales que corresponden a un Estado de Derecho.

Es un acto de cobardía y de falta de inteligencia, ahora que otros están defendiendo la democracia interna en UPyD y pagando con su propia biografía, que los que han tenido que irse por goteo ante las cacicadas de los dirigentes no den la cara, y confirmen lo que ha ocurrido. Ahora es el momento de limpiar su nombre de cualquier responsabilidad ante lo ocurrido, porque por su intervención pública, muchos ciudadanos, confiando en personas conocidas, demócratas, gente a la que respetaban, que representaban al comienzo a la UPyD, entregaron su voto a Rosa Díez, y eso le ha permitido hacer lo que ha hecho con su partido, henchida de poder y soberbia, sin admitir siquiera la posibilidad de haberse equivocado. Es la hora de que los demócratas no se queden callados.

Pero si Rosa Díez y Martínez Gorriarán no han admitido que se han equivocado, es que realmente no lo han hecho, es decir, se confirma que se han cumplido sus planes, de lo que se deduce que lo que ha ocurrido estaba planificado en sus cabezas, cuando iniciaron el proyecto desde la Plataforma Pro, engañando a todo el mundo, militantes y votantes.

Y prueba de que estaba organizado en sus cabezas es lo ocurrido en Cataluña, donde el partido no ha levantado cabeza, ni electoralmente, ni en apoyos de militantes, se ha aburrido a los que acudieron, pero se ha mantenido a Hernández Guardia en la coordinadora, habiendo sido responsable de lo acontecido. Que este señor haya pertenecido al PSC, tal vez explique algunas cosas, al igual que el coordinador de Madrid, Marcos Allo, que ha sido apoyado por los dirigentes, a pesar de haberse cargado el partido en Madrid, que es su feudo principal.

La confianza depositada por los máximos dirigentes del partido en los compañeros que provienen del PSC, más allá de su capacidad política demostrada, su habilidad personal en relaciones humanas, es un ejemplo palmario de que los máximos dirigentes de UPyD solo depositan su confianza en los que saben que no les pueden hacer sombra, que no cuentan con recursos propios para hacerse un hueco en la organización y que sólo apoyando a Rosa Díez pueden aspirar a alguna cosa en el futuro, porque saben que sólo desde su condición servil a los dirigentes máximos, por su concesión, pueden aspirar a algún puesto político que por sus propios recursos jamás alcanzarían. Patrón que se repite para la inmensa mayoría de los que se han quedado, que tragarán con todo, con tal de ver colmadas en el futuro sus ambiciones personales.

La jornada de puertas abiertas de UPyD comienza ahora, los más inteligentes se han ido ya, les seguirán los creyentes que ya no pueden seguir creyendo ante los hechos expuestos, más tarde, los que han confiaron en los dirigentes y serán defraudados, por último, los que llegaron para echar una mano a un proyecto político que les agradaba, y que han visto que se ha estropeado para siempre. Evidentemente alguno nuevo llegará, pero quien sea capaz de entrar ahora mismo en UPyD, es que todavía es mucho peor que los que se han quedado, con lo que el conflicto está asegurado hasta su final.

Pero la pregunta más interesante es: ¿quienes se quedarán?. Sabiendo el precio que están dispuestos a pagar, se puede cuantificar el valor de su ambición personal.

La UPyD comenzó siendo un sueño, ahora se ha convertido en una pesadilla tan violenta y estúpida, que sólo se puede acabar, cuando los seguidores del partido magenta se despierten del coma autoritario que les han inducido, antes de que regresen de vacaciones los señores feudales, por supuesto, y comience el nuevo curso político.

jueves, 16 de julio de 2009

La sonrisa magenta 4

Comienza el espectáculo


Ahora que se han ido Mikel Buesa y unos cuantos más, y que los de estanoeslawebdeupyd están caminito de la salida; ahora que algunos de los más fieles seguidores del magenta están viviendo el conflicto en que les han metido los dirigentes designados y los críticos designados de UPyD (que sí, que todos han sido designados, tú que no protestas, callas y aplaudes, serás dirigente; mientras que tú, que preguntas, hablas y aplaudes poco serás crítico). Esta es una de las ventajas de los partidos autoritarios, que todos son designados, oficiales y críticos.

A lo que iba, que ahora que unos están fuera, otros dentro y otros pensándose si merece la pena continuar con esta pantomima, se puede hacer una reflexión sobre los estados de ánimo de los militantes de UPyD, este partido que está en crisis de crecimiento intelectual, porque realmente no da más de sí. El pensamiento único hará estragos en los próximos meses, el partido se llenará de notables aspirantes a concejales, porque la política de tierra quemada de los que respetan la democracia y denuncian su inexistencia en el partido magenta, ha vetado el lugar como un escenario más tóxico que Chernobyl, para los que tengan otra idea que la de sus propias aspiraciones personales en política.

Al final, siempre ocurre lo mismo, las crisis, si se saben manejar fortalecen el partido, pero si no se sabe conducirlas, generan tales destrozos que resultará prácticamente imposible levantar cabeza. Así que todos han resultado perdedores, los demócratas que se han ido para sus casas, de forma voluntaria o involuntaria, y los trepas que se han quedado esperando una promoción personal que mejore exclusivamente sus circunstancias vitales, con la pancarta alzada de “es por vuestro bien, ciudadanos”. Quizás haya un tercer grupo, más ingenuo y menos avezado en estas cosas de la política, que piensa que el Congreso de noviembre será la panacea de todos los males, estos están al borde del pensamiento mágico, porque las posibilidades de que el bodrio se reconfigure hasta convertir el partido en una formación democrática, en que la pluralidad, la libertad y la justicia sean posibles, es más difícil que una rectificación de la infalible Progresista, que nunca se equivoca, o que Gatokan, tenga un debate con sus siervos en igualdad de condiciones.

El retrato final de la escena queda de la siguiente forma: unos se van porque no hay democracia interna, porque la divina es la divina, y porque no han venido para guiar a los camellos de los emires por el desierto de las intenciones sobrevenidas; otros se van porque se han dado cuenta de que como la designación directa por los que mandan es la frontera que les separa de su destino político, que ahora se ve limitado a lo de hacer méritos, la pelota y el lisonjeo suficiente para ser elegidos para la gloria; otros, en fin, se van porque se han hartado del espectáculo y se han dado cuenta de que la agonía será larga y están dispuestos a perdérsela. Pero quizás más importante que los que se van son los que se quedan, viendo las barbas del vecino rasuradas. La democracia estará restringida, la libertad clausurada, la única pluralidad será la de decir que sí, y la justicia les recordará a los tribunales islámicos.

Dentro de unos meses, permanecer en UPyD será sinónimo de arribista, de trepa, de político descarado que quiere medrar a cualquier precio, de pelotas, de siervo, y de no sé cuantas cosas más.

Y ya me imagino cuando Rosa Díez llegue al Parlamento pidiendo democracia y le contesten que está ella buena para dar lecciones, que pida libertad, y le digan que primero debería concederla a los suyos; que hable de igualdad, y le espeten que si como la que han tenido en su propio partido los que han tenido que largarse; y cuando hable de la justicia, le dirán que si ya cumple su formación la Ley de Partidos, o sigue de carencia ilegal.

El panorama es desolador, porque a partir de ahora Rosa Díez va a estar más vigilada por sus rivales y los periodistas de lo que lo ha estado en toda su vida, y no nos engañemos, Rosa Díez tiene un discurso muy populista, que queda muy bien, porque siempre dice lo que se espera que diga, como un lorito, pero en la réplica baja bastante, sobre todo si es inmediata, no tiene recursos propios, tiene salidas, nada más; carece de coherencia lógica y cuando le aprieten las tuercas acabará metiendo la pata por la presión y eso será noticia. A estas alturas no va a aprender los trucos de la retórica, es demasiado mayor y soberbia para que permita que alguien le enseñe algo, y ella, como los buenos toreros sale a la arena a hacer una buena faena, pero no sabe capear una mala racha, para que no se note. Se ha encastillado tanto en el discurso positivo que ahora está atrapada por sus propias palabras, no puede rectificar fácilmente, y simplemente cumplir objetivos, hasta otra oportunidad mejor.

El peor enemigo de Rosa Díez va a ser su anhelado protagonismo, no se ha dado cuenta de que si bien puede soportar lo que le echen, los focos y los maquillajes, lo que no puede soportar es su propio discurso, por eso los micrófonos y las notas de los periodistas se volverán contra ella. Hasta ahora lo tenía fácil, solo tenía que decir lo que no decían Zapatero o Rajoy, pero ahora lo tendrá muy difícil, porque tendrá que sostener con sus propias palabras los hechos de Rosa Díez en su partido o arriesgarse a quedar como una charlatana dicharachera.

Los que se van lo han hecho muy bien, porque su acción, como la de los buenos picadores y subalternos, ha servido para dejar a la Divina ante los micrófonos, ante el diestro mediático, que no le va a pasar por alto los rebufos y los amagos. Y como el partido de Rosa Díez es sólo de Rosa Díez, la responsabilidad sobre lo que ocurra, de ahora en adelante, también será exclusivamente de Rosa Díez y sus fieles seguidores. La autocrítica no existe, así que los enemigos tendrán la culpa de lo que ocurra en la formación magenta.

El partido se ha liberado de críticos, pero inicia una lenta y dolorosa agonía, los críticos han quitado el velo que cubría la auténtica catadura moral de la formación magenta, y ahora los periodistas esperan ansiosos para retratar su hedionda deriva. Este país nuestro no es indulgente con los que desbarran, aunque lo sea con los que defienden la alegría o la independencia moral. A Zapatero o a Rajoy se les perdonan muchas cosas que a Rosa Díez no se le disculparán y Rosa Díez tampoco disculpará a quien no la perdone o le marque un desconchado. Sin duda, el espectáculo está garantizado.

Es lo malo que tiene ser diva, que un día, por una tontería cualquiera, se deja de serlo, se cae del pedestal y ya no se puede volver a subir a él. Así es la vida. Quien a infamia mata a infamia muere. Quien calla ante las injusticias, se condena a recibir el mismo silencio cuando se cometan con ella. Quien no acepta las protestas ajenas, no puede exigir que las propias se escuchen. Quien pidió en el PSOE democracia, no puede negarla en UPyD, cuando es la que corta el bacalao. Las incoherencias políticas se pagan con elevados intereses.

Ahora, Rosa Díez nos podrá mostrar su auténtica resistencia, con viento de proa, no se surcan los mares electorales. Esa es la tormenta que se avecina, y no la de los que se van desconsolados por el engaño a que han sido sometidos.

miércoles, 15 de julio de 2009

Introducción a la trepología


Ramnusia


"Aquel a quien los dioses quieren destruir, primero lo vuelven loco". Eurípides

Lo he visto con mis propios ojos de berenjena, él mismo, con su nombre y dos apellidos, nuestro nunca bien ponderado Gatokan, ha descendido hoy en su blog desde el mismo lecho de Procusto que es la UPyD, para mostrar a los simples mortales los errores que han cometido y están cometiendo, los que osan cuestionar su sabiduría, su buen hacer político. Desmintiendo todo lo ocurrido, ni cartas, ni cortes, él, que ha administrado la criba del partido a su criterio, sin respetar ni reglas, ni códigos, ni siquiera los buenos modales, ha descendido del Olimpo que se ha montado, para decirnos a los pobres mortales que el partido magenta sólo puede existir a la medida de sus deseos e intereses, siempre justificados por las supuestas necesidades del partido.

Lástima que haya comenzado su post con esa frase que indic la expresión de alguien que no se considera como todos los demás: “sin que sirva de precedente”. Ahí lo ha estropeado todo, porque ha catalogado su intervención como una concesión que él se permite, no como un derecho de los que le critican a una explicación por parte de un compañero, ¿conoce este prodigio la humildad?, ¿pero cuánto miedo acumulado tiene este sujeto a debatir con los demás en igualdad de condiciones, con sus propios compañeros?.

Veamos, consultaré el Diccionario de Mitología de Noel, las obras de Joseph Campbell, Alan Wats, y Mircea Eliade, a ver si encuentro algún personaje que pueda contraponer al Procusto ese, que hacía con el lecho lo que Gatokan hace con el partido magenta. Hay ocasiones en las que más nos valdría habernos quedado callados, a este hombre le traicionan el inconsciente y la soberbia, porque los ejemplos que elige, se vuelven contra él para perseguirlo como una sombra de estupidez de la que no puede zafarse. No, no se crean, no puede ser casualidad, alguien que comete tantos errores al crear los problemas, como al tratar de lograr soluciones, es que es torpe, no cabe otra.

Bien está lo que está bien, en mi condición de berenjena yo le hablaré al émulo de Procusto de Ramnusia, también conocida como Némesis, diosa griega de la justicia distributiva, la venganza y la fortuna. De su unión con Zeus, nació Helena de Troya, el personaje que desencadenó la batalla en la que los griegos se enfrentaron contra los troyanos, venciéndoles gracias al caballo que Ulises ingenió para acabar con ellos desde el interior de la ciudad.

Ramnusia, castiga sobre todo
la desmesura (hybris) , la de los políticos y gobernantes en especial, sancionando los comportamientos desproporcionados de los humanos, para dejarles claro, que su condición no divina, les impide ser excesivamente afortunados y que no pueden trastocar con sus actos el equilibrio universal, ni la equidad, ni la justicia. El rango de acciones permitidos a los humanos, todos por igual, no debe sobrepasar determinados límites, ni deben aspirar a la condición reservada para las divinidades, para estar por encima de sus semejantes, sin merecérselo. Ramnusia envió al afortunado Creso, que todo lo tenía a una expedición contra Ciro, tras convencer al oráculo de Delfos para bajarle los humos, y el pobre Creso terminó sus días en una hoguera, hecho humo, invocando el nombre de Solón, uno de los siete sabios de Grecia, famoso legislador y reformador ateniense, un auténtico héroe de la democracia, al que se atribuye la frase: guarda todo con mesura, por la que posiblemente le recordaba en su final el ambicioso Creso.

Sin que sirva de precedente, Gatokan, no te deseo un final como el del pobre Creso, aunque si llegara a ocurrir, posiblemente tú no nombrarías a Solón, que va, seguro que te despedías diciendo:
“malditas berenjenas”, lo que sería un enigma para las generaciones venideras, y para los periodistas, que no dejarían de echar leña al fuego mientras te ibas consumiendo entre todas tus mentiras develadas y tus ambiciosos sueños personales. Menos mal que somos laicos y no creemos en tonterías.

lunes, 13 de julio de 2009

La crisis de crecimiento de UPyD


Tiene razón Rosa Díez al definir lo que está ocurriendo en UPyD como una crisis de crecimiento, es muy posible que el partido magenta no vuelva a crecer más, se ha quedado atrofiado, deforme y enano, el motivo de la hipogénesis tiene su origen en una mezcla de las barbaridades cometidas por los dirigentes designados, las denuncias por parte de los disidentes y la fatiga de los decepcionados ante este conflicto irresoluble. La actitud despótica de la divina progresista, junto a la negación de la crisis por parte de la cúpula, añadiendo las conductas de bomberos voluntarios de Boadella y Savater, han contribuido a incrementar la patología de desarrollo de UPyD. Los dirigentes del partido magenta ni han sabido evitar la crisis, ni tampoco resolverla, mostrando su tremenda incapacidad política. Esto es un hecho.

No se ha podido hacer más, a pesar de que en sus filas contaba con recursos humanos suficientes para que hubiera sido otra cosa distinta a lo que es, y estando a punto de recoger los numerosos recursos humanos existentes en este país, no adheridos al maniqueísmo del PP-PSOE, el proyecto se ha malogrado, convirtiéndose en un engendro. No ha podido ser, los partidos políticos también tienen su proceso de evolución propia, si no resuelven determinados problemas de crecimiento en su seno, están condenados a la extinción irreversible. Antes le había ocurrido a otros partidos emergentes, la erosión mediática terminará la faena.

Sin embargo se han conseguido algunas cosas, quizás la más importante es que ahora los ciudadanos sopesarán las palabras de Rosa Díez antes de creérselas a pies juntillas y emitir aplausos y votos a su favor; la Divina Progresista, que es todo un carácter, como es incapaz de admitir que la responsabilidad del enanismo del engendro es cosa suya, se liará a buscar culpables entre los que la rodean, se preguntará si Gatokán realmente no es tan inteligente como se supone, si quizás no se han equivocado al haber sido tan caciques en su trato a los disidentes, quizás, si hubieran sido más amables y diplomáticos, menos soberbios y despóticos, con la gente de Mikel Buesa y Gerardo Hernández Les, ahora las cosas serían diferentes y el partido no tendría tantos problemas. Iba todo tan bien, y se ha estropeado el panorama sin remedi, en menos de un mes.

Ahora los dirigentes saben, no pueden no saberlo, que los periodistas, aviesos de noticias malas, estarán al loro y no dejarán siquiera que pase una oportunidad para seguir demoliendo el partido, porque en realidad es cómodo, no tiene consecuencias. Así se lavan la honrilla de no ir contra los que les dan subvenciones y publicidad oficial, pero demuestran de esta forma a sus lectores que ellos son unos auténticos héroes de la verdad política. UPyD se va a convertir en el pim pam pum de la prensa española, que se vaya olvidando de los apoyos mediáticos de los líderes de opinión, porque los ha perdido para siempre, UPyD será el partido apestado, la representación palmaria de lo que son los partidos políticos en este país, una cochambre sin democracia, sin libertad, sin justicia, que pretenden ofrecer sus soluciones, cuando no son capaces de resolver siquiera los problemas en su propia casa.

Al final, los disidentes saben que no tienen ninguna posibilidad de triunfar en esta batalla, pero si tienen la capacidad de hacer que su rival se desmorone ante la opinión pública, al menos conseguirán que el engaño cese. Ciertamente, su reacción es lógica, ¿qué esperaban los dictadores, que les regalaran el partido?, ¿pero si son demócratas, como iban a hacer eso?. Los oficialistas se quedarán con el partido, porque eso parece que no se puede evitar, pero tan lleno de porquería que se van a tener que dedicar el resto de sus vidas a desatascar las cloacas y alcantarillas, a ver si con suerte sanean la fosa séptica. Cruel destino para quienes habían vuelto a creer que la fortuna les había sonreído. Realmente no han entendido nada, no se han dado cuenta de que si ellos triunfaban con sus arbitrariedades, los críticos tendrían que soportar la etiqueta de imbéciles para toda su existencia, y tanta generosidad no se le puede exigir a nadie.

¿Para qué ha servido toda esta pantomima?

Quizás para constatar, una vez más, que en la política española no es posible fundar una formación política en la que las cosas sean normales, o mejor dicho, que se corresponda en su contenido con lo que se anuncia en la propaganda de enganche; o para demostrar, una vez más, que las intenciones de los dirigentes siguen siendo las de aprovecharse y alimentarse de las ilusiones y esperanzas de sus seguidores, a los que en la intimidad de sus reuniones de notables posiblemente desprecien; o quizás, y esta opción me parece más perversa, aunque no puedo dejar de pensar en ella, para desanimar a los ciudadanos y que pierdan toda esperanza de que las cosas en la política puedan cambiar, con lo que se demuestra que la UPyD ha funcionado como inquebrantable frontera del escenario que separa lo social de lo político.

En el partido magenta, que comenzó siendo un intento de nuevo paradigma político fundamentado en la confianza, si bien esta ha funcionado durante un tiempo –excesivo, hay que reconocerlo- desde los militantes hacia los dirigentes, nunca lo ha hecho desde los dirigentes hacia los militantes, lo que se puede comprobar con el 75 % de abandonos del consejo político fundador, las destituciones de coordinadores con pensamiento propio y el mantenimiento de los que no piensan más que lo que les manden los dirigentes, los expedientes y expulsiones ilegales, la asfixia de cualquier iniciativa democrática, el amordazamiento de cualquier expresión propia y de comunicación fluida entre los militantes, y ese clima tóxico de autoritarismo, opresión, injusticia y privilegios que se ha acabado respirando en el partido. El partido de Rosa Díez, es sólo de Rosa Díez, de los que no contradicen a Rosa Díez y sus leales capos. Magnífico retrato final de un esperpento político.

Y ahora el futuro

En fin, otra oportunidad perdida para los demócratas, porque el precio que exige la pertenencia a la formación magenta es la renuncia a la democracia, la libertad, la pluralidad y la justicia, demasiado elevado para todos los que no se conformen exclusivamente con ser concejales, y con eso esperan ver colmadas sus aspiraciones en política, al precio que sea; para todos los creyentes, que sigan pensando que la política sigue siendo una opción de porvenir y solución a los problemas sociales, independientemente de quien ocupe las concejalías. Pero hay que reconocer que los que han tirado de la manta, han sido generosos con todos los demás, quizás deberían haberlo hecho antes, pero si lo hubieran hecho, el partido no hubiera alcanzado los resultados electorales que ha conseguido, y algo que no tiene realidad pública poco importa que sea democrático o dedocrático. A los dirigentes designados, se les podía dejar hacer hasta que el partido alcanzara el grado de realidad suficiente en que hubiera decidir si se pasaba a la siguiente fase o se abortaba el despegue.

Realmente los cambios en los partidos políticos ocurren por acumulación de despropósitos de los dirigentes, el grado de resistencia de los disidentes depende de muchos factores, habitualmente personales, pero también de comunicación fluida, de establecimiento de acuerdos posibles, de análisis compartidos, y de una dosis de escepticismo suficiente, tras haber creído en algo con todas sus fuerzas y haber dejado de creer. Eso lleva su tiempo de experiencias propias.

Definitivamente se abre un porvenir poco halagüeño para el Partido de Rosa Díez, ahora todo el mundo sabe que nunca será otra cosa que el Partido de Rosa Díez. La decadencia de resultados será directamente proporcional al paso del tiempo, a partir de ahora, el partido se nutrirá de arribistas que terminarán destrozándose entre ellos por crisis intestinas. A algunas se nos ha convertido el magnífico sueño en desquiciada pesadilla, ¿verdad, Rosa Díez?, espero que no te redimas atiborrándote a berenjenas, eso no estaría bien, se notaría demasiado y tu eres muy discreta. Así que como dice El Mundo en su crónica del domingo te paseas por ahí con una carpeta que dice "Yo Elijo", pues perdona bonita, pero Eli Jo, sólo hay una y soy yo. Bye.

domingo, 12 de julio de 2009

Anticipando la tiranía

La valoración de la intelectualidad como un elemento positivo para la sociedad, es un fenómeno que arrastra la civilización occidental desde el valiente enfrentamiento de los ilustrados a las representaciones del poder absoluto, representado por las monarquías, la religión, el capitalismo y el socialismo. Los auténticos intelectuales, siempre han sido rebeldes con el devenir, se han forjado en la protesta y el desencuentro con la “dictadura de los hechos sobrevenidos”, han sido muy escasos a lo largo de la historia, los intelectuales que han apoyado a las personas, y todavía más escasos los que han apoyado el poder, aunque lo pareciera, y si lo han hecho, siempre ha sido desde el sarcasmo trascendente, desde Maquiavelo o Spinoza hasta Quevedo o Voltaire.

Los intelectuales, desde que Biante de Priena pronunció en el siglo V a.C.la frase: “la humanidad está cautiva”, pasando por la mayéutica de Sócrates, la alegoría de la caverna de Platón, o la influencia de Aristóteles sobre Alejandro Magno, siempre han tenido en mente el buen uso del poder, que no es otro que la liberación de los seres humanos de sus ataduras reales por parte de los que se aprovechan de ellos, sea por sus privaciones culturales o económicas, o por su aplastamiento literal por el consumo de propagandas urdidas por los políticos con la finalidad del engaño, esos parásitos que viven de organizar la vida de los demás, creándose un mundo paralelo de ventajas y privilegios, una clase que usurpa y detenta el poder que les confiere la representación política, en su propio beneficio.

Resulta extraño, por tanto, el fanatismo político que apoya a los personajes por encima de las personas, que confía en los discursos y no en la realidad de los hechos, que se guía por la ratificación y no por la refutación de las palabras de los poderosos, sean Presidentes del Gobierno, Alcaldes, o Presidentes de una Comunidad de Vecinos. Sí, resulta paradójico y contradictorio el comportamiento de Albert Boadella y Fernando Savater, como ayer nos relataba Juan Hernández Les, hermano de Gerardo, uno de los disidentes de UPyD, en un magnífico artículo titulado: “Verdad y Política”, ¿será necesario refutar también a los intelectuales que se adhieren a la insidia y contumacia política de los dirigentes de UPyD?.

Es posible que así sea, antes de pagarles el viaje de ida sin regreso posible, al museo de la infamia política y la intrascendencia, junto con todos los dirigentes de UPyD. Nada mejor que hacerlo sobre sus propias palabras, porque a los intelectuales se les debe exigir coherencia en el mensaje y el discurso, precisamente por no ser políticos, están obligados a fundamentar sus palabras en un pensamiento propio, más allá de la congruencia consumista de decir lo que convenga escuchar al auditorio, para buscar su aplauso y glorificación, tarea reservada a los políticos. Quizás el mejor ejemplo de intelectual pleno y trascendente que tenemos en España sea Gustavo Bueno, que se ha dedicado a refutar el poder político, tanto o más que la estupidez humana, el último erudito español vivo, que ha hecho lo que se espera que haga un intelectual: enfrentarse a la memez, en todos sus ámbitos, sin distinguir si es de la élite o la chusma, eso le convierte en inmortal vivo, una categoría que pocos alcanzan.

Habla Fernando Savater de respetar las reglas, ¿qué reglas, Fernando?, ¿las monásticas o las de la orden del percebe?. Precisamente Fernando, eso es lo que han hecho los disidentes de UPyD, respetar las reglas, pero las fundamentales: los Derechos Humanos, la Constitución Española, La ley de Partidos; los que no respetan esas reglas, amparándose en un reglamento de usurpación que se han confeccionado a la medida de sus ambiciones, son los dirigentes del partido de Rosa Díez. Los buenos son los que exigen el cumplimiento de las reglas fundamentales: democracia, libertad, igualdad, pluralidad, efectivamente, los malos son los que se las saltan para imponer su criterio a los demás en plena impunidad, la Divina Progresista, Gatokan, los palmeros y los serviles.

Te contradices, Fernando, cuando pides respeto a las reglas y en tu obra “Política para Amador” nos has dicho: “El individuo (o sea, cada ser humano concreto, único, irrepetible, distinto a sus vecinos, con su voluntad, su apoyo, sus decisiones…., es el fundamento último de la legitimidad del Estado” (página 108). Y quien dice el Estado, está diciendo los Partidos Políticos que institucionalmente lo regulan. ¿Pretendes conculcar el derecho individual fundamental con derechos colectivos “ad hoc”?. Pero todavía te contradices más cuando en la página 132 del mismo libre dices lo siguiente: “… y es que estos partidos, que no son más que un instrumento para facilitar que todos podamos participar en cierta medida en las tareas de gobierno, terminan convirtiéndose en fines en sí mismos y decidiendo lo que está bien y lo que está mal: todo lo que se hace a favor del partido es bueno, lo que perjudica al partido es malo. Una creencia muy peligrosa que debe ser combatida de tres modos: a) aplicando con toda severidad las leyes y no dejando impunes los delitos de nadie, por alta que sea su situación en la jerarquía política del país; b) procurando relativizar el papel de los partidos políticos, quitándoles privilegios e importancia, no aceptando los mecanismos autoritarios que impiden las voces críticas que hay en ellos, expresar y hacer valer sus opiniones; c) desarrollando otras formas paralelas de participar en la vida pública de la comunidad, como colectivos ciudadanos, asambleas de vecinos, agrupaciones laborales, etc…”. Fernando, te contradices entre lo que propones en “Política para Amador” y lo que haces para defender a Rosa Díez, eso quedará reflejado en la cuenta de resultados de tu biografía, junto con el daño que has causado a UPyD, y a la evolución política de este país. Lo siento.

En cuanto a ti, artista Boadella, tú que has sido “l´enfant terrible” de la política española, especialmente el azote del nacionalismo catalán, tú que te has permitido socavar las raíces mismas del poder para mostrar a todo el mundo su peligrosa perfidia, ahora vas y te descuelgas con consejos de gastronomía política para cocineros de chiringuito playero. Pero vamos a ver, Albert, que te estás haciendo viejo, demasiado viejo y cómodo, en tu exilio bajo las faldas de Madame Aguirre. Tú que has dicho en tu inolvidable obra “Adios Cataluña” algo tan acertado como lo siguiente: “La propia Administración promoviendo la segregación entre ciudadanos. Eso no tenía más explicación que la ignorancia y la insensatez, las dos cosas a un tiempo, que convierten a estos individuos en sectarios y, por lo tanto, en perfectamente inmunes a la autocrítica. La realidad me venía demostrando que me hallaba ante gente cuya conducta estaba más cercana a los aparatos de los regímenes totalitarios que al político humanista de una sociedad democrática” (página 210). Pues precisamente, Albert, es la misma experiencia que han tenido los disidentes de UPyD. ¿Vas a negar a los demás lo que te concedes a ti mismo, Albert?. Reflexiona e infórmate, porque nos jugamos mucho, exactamente todo, Cataluña también, Albert, que mira lo que ha hecho UPyD hasta ahora en esta comunidad sediciosa y comprobarás de que va todo esto.

Definitivamente me quedo con el “loco” de Gustavo Bueno, mi disidente favorito, porque nunca me ha fallado en su coherencia, cuando tuvo que ir contra Franco lo hizo, cuando tuvo que ir contra sus sustitutos, también; guiado siempre por esa magnífica frase de los intelectuales de verdad ante la realidad estúpida: “no es esto, no es esto”. Gustavo Bueno nos saca de dudas, una vez más, en su libro “Panfleto contra la democracia realmente existente” cuando con simpática perspicacia nos deleita a los demócratas: “como decía Bujarin: “en la dictadura del proletariado cabe la pluralidad de partidos, siempre que los que defienden el régimen estén en el Gobierno y los de la oposición estén en la cárcel”, cómo me recuerda al comportamiento soviético la UPyD.

Pero quizás la frase que más afortunada y enigmática que recoge en su obra, sea la de Sieyès, que mantenía un gran recelo por los partidos políticos: “la libertad que se ejerce en el momento de elegir a los representantes, se pierde en el momento en que éstos comienzan a ejercer su poder” (página 227). Para añadir a continuación: “lo cierto es que los programes se componen no por el pueblo, sino por las “aristocracias políticas”, constituidas por las cúpulas de los partidos (a las cuales los individuos acceden por canales necesariamente concretos, individualizados y, en modo alguno, “democráticos”). En este sentido, una democracia parlamentaria se nos manifiesta de nuevo como el revestimiento ceremonial requerido por una sociedad de mercado en la que el pueblo ha de ser cómplice, y no sólo víctima de los programas de unas “aristocracias” que necesitan el consenso que pueda encubrir la falta de acuerdo” (página 232).

Unas últimas palabras para aclaración de contenidos, en una organización predemocrática como UPyD, la distribución del poder se ha realizado exclusivamente por designación de la cúpula dirigente, que ha sido rápidamente ratificada por los palmeros del club social del consejo político (tras extinción natural o interesada del 75 % de los fundadores), en los que sus ambiciones personales pesan más que su afán de servicio a los demás, a la democracia y a la libertad. Pero no han sido aprobados por otras facciones del partido que se han terminado yendo, de forma más o menos discreta, o han presentado batalla al ver sus derechos conculcados por la cúpula dirigente, que por su poder de designación han determinado quienes serán los elegidos para la representación de su partido, más allá de la voluntad democrática de todos los que lo forman.

Para quien no lo acabe de entender lo que ha hecho Rosa Díez y la cúpula dirigente de UPyD, es el mismo procedimiento que han utilizado los dictadores como Franco, Pinochet, Fidel Castro, Hugo Chávez, o recientemente el hondureño Zelaya, dar un Golpe de Estado (en este caso de Partido), considerando que la democracia es innecesaria, porque ellos, en su propia persona, pueden representar mejor los deseos y necesidades de su pueblo (sus seguidores); para nada necesitan la pluralidad realmente existente, porque ellos (los líderes) saben perfectamente lo único que conviene al futuro de todos los demás, representado en un pensamiento único, el suyo.

Pero entonces no estamos hablando de democracia, sino de autocracia, y lo que no cumpla reglas democráticas, por mucho que se haga con la mejor de las intenciones, es anticipo de la tiranía que vendrá, por muchos congresos amañados que se hagan, UPyD ha demostrado que es un instrumento inútil para lograr la regeneración democrática, puesto que desde la degeneración no puede surgir ninguna regeneración posible de la democracia, sino su extinción definitiva.

He dicho, Señor Presidente, como portavoz del silencio de los demócratas, a los que he decidido representar en esta ocasión, a título voluntario, como una más de todos ellos, espero que sepan disculparme si me he equivocado.

sábado, 11 de julio de 2009

Los que callaron




Lo han hecho, sí, como era de esperar. Ya no niegan la crisis, ahora ni la niegan, ni no la niegan. Con un consejo político, en el que se han dado de baja más del 75 % de los miembros del consejo fundador, se ha aprobado hoy, no sé qué, que más da.

Demos una vuelta por los anzuelos para incautos de 2007, escribía Carlos Menéndez en Plataforma Pro, lo siguiente, por entonces:

"El funcionamiento de la democracia depende en buena medida del respeto a las reglas, pero también de que los partidos e instituciones que gestionan la política y representan o administran a la ciudadanía estén sometidos a normas exigentes de funcionamiento democrático interno. Es un contrasentido esperar que partidos autoritarios y burocratizados, que no respetan la menor pluralidad de corrientes en su seno o que se financian por medios turbios, actúen de otro modo cuando están en las instituciones. Por el contrario, la experiencia demuestra que una vez en el poder tienden a transmitir al Estado y a la sociedad sus propios vicios e irregularidades. Los escándalos de corrupción o de mala gestión de recursos públicos no son, muchas veces, sino la consecuencia de la extensión de malas prácticas corrientes e impunes en el interior de los partidos políticos y de las instituciones que controlan."


A la vista de lo que hoy conocemos de UPyD, la gente que acudió a engrosar las filas del proyecto magenta por argumentos como el anterior, saldría corriendo despavorida; pero ya no son necesarios, porque la divina progresista ya ha pasado de la nada al micrófono y ahora lo único que necesita es siervos que estén dispuestos a obedecer, callarse y pertenecer a una formación estalinista, sin inmutarse, al ver como sus compañeros hasta ayer compañeros, por pedir democracia y libertad, son expulsados del partido, o tienen que irse antes de que los expulsen. En la cuenta de resultados de su biografía quedará escrito para siempre su mezquindad.

Un elevado precio el que se exige hoy a los militantes de UPyD, un partido que se considera laico, exige creer en la única verdad de la que es profeta Rosa Díez; un partido que propone la regeneración democrática exige a sus militantes que acepten el autoritarismo déspota más degenerado como clima de convivencia; un partido que habla de la libertad, la impide en su seno; en fin, un partido que habla de igualdades distingue dos clases por designación, ni siquiera ya por nacimiento como en la época feudal, los dirigentes y los dirigidos, y no hay más posibilidades, cada uno tiene que ocupar su puesto en este OPUS magenta, para mayor gloria de Rosa Díez y sus edecanes.

¿Merece la pena entregar la dignidad propia a este akelarre de arbitrariedades?. Ni por los hijos se pierde la dignidad, así que los que decidan quedarse en UPyD estarán señalados de por vida como aquellos que cuando vieron que unos dirigentes fascistas impedían la democracia en su partido, callaron; cuando vieron que los dirigentes habían mentido abiertamente, callaron; cuando vieron que los dirigentes cometían auténticas tropelías, callaron; cuando vieron a sus compañeros de hace pocas horas salir abatidos por la puerta de la ignominia que les han preparado los dirigentes designados, también callaron. Y callaron ante el aplastamiento de los derechos fundamentales de los discrepantes, y callaron ante las barbaridades de los déspotas. Sí, los que se quedan, son los que callaron ante la injusticia, la opresión y el privilegio de los dirigentes, sin ellos no sería posible que ocurriera. Ya no se pueden llamar ciudadanos, ahora son políticos, unos políticos más.

Los que callaron, son los que hoy forman UPyD, ellos sabrán porque lo hacen. Que los juzguen quienes les conocen, sus parejas, sus hijos, sus amigos, sus conocidos, sus vecinos y la historia, yo no pienso hacerlo.

También hay otros que hablan para defender el silencio, esos jóvenes profetas de la causa como Albert Boadella y Fernando Savater. Ellos son aún peores, porque no se callaron, y pretenden con sus palabras que continue el engaño a los ciudadanos. No hay reglas, ni estrategias que valgan, para justificar la falta de democracia. Antes las personas que las reglas. Antes las personas que las reglas y los personajes que las imponen. A la mierda con vuestras reglas para favorecer el poder sin democracia y sin libertad.

viernes, 10 de julio de 2009

Contando cadáveres

En el sanedrín magenta tratan de identificar el agente que ha causado la eclosión de libertad que se está viviendo en plenitud y alegría. Pero se equivocan, lo hacen casi siempre, será torpeza, incapacidad o falta de luces. El problema no ha sido el agente, sino el paciente, que ahora está atravesando un episodio de agonía prolongada. Pero estos ilustres mentecatos seguirán buscando microbios, cuando en realidad deberían comprobar las insalubres condiciones de existencia, que han procurado al partido de Rosa Díez.

¿Qué esperaban que ocurriera sin democracia, ni libertad?. ¿Se pensaban, acaso, que la gente estaba dispuesta a soportarlo todo porque ellos, humanos especiales, de una casta superior, serían capaces de ensombrecer al mismo sol con sus manos?. Que enorme soberbia la de Gatokan, escribiendo sobre televisión, mientras permanece acorralado y cuestionado hasta por los más próximos después de convertir el partido magenta en un campo de concentración. Gatokan te has pasado tres pueblos, y es que no sabes, hombre, porque te ha reventado en la cara el engendro que estabas construyendo a imagen y semejanza de tus delirios despóticos de grandeza. Más vale morir, que perder la vida.

Ni una autocrítica, oiga, claro, eso se puede entender, porque si admitieran la extraña posibilidad de que han descubierto que al fin no son infalibles y se han equivocado, tendrían que asumir las responsabilidades correspondientes, y esto ya no se salva ni con la dimisión-destitución del titiritero, que la cosa ha ido a mayores, y hasta los abuelos, Boadella y Savater, han tenido que acudir al rescate de la señora princesa. Hoy me he enterado que han haqueado el foro de Ciudadanos en la Red, unos chicos de la legión magenta de jóvenes promesas, porque no podían soportar más las críticas ingeniosas y contundentes que allí se vierten de forma cotidiana, por parte de muchos de los expedientados, expulsados y algunos amigos de la democracia y la libertad. Así que acallando al mensajero con malas artes, pero mira que son tarugos los del CD, que se piensan que pueden silenciar a los críticos, y así resolver el problema que tienen encima, por el que están atrapados, y del que no saben salir.

Que sí, que ya sabemos que lo de conseguir militantes sólo era preciso para que lograran empujando con todo su esfuerzo los resultados electorales que permitieran a la Divina Progresista colgarse del micrófono y el colorín, y que ahora ya no son necesarios, que se vayan todos los discrepantes, con mil o dos mil militantes nos sobra y todos homogéneos como clones o borregos, que para las municipales ya buscaremos concejales entre los disidentes del PSOE y del PP, que vendrán como moscas. Pero claro, el problema que ahora se plantea es que de aquí a las municipales, si se marchan demasiados, la divina progresista se nos va a quedar colgada del micrófono y cágate lorito, porque los que le hacían los discursos y los que la conducían como lazarillos por el frondoso bosque de las propuestas parlamentarias y televisivas, también se han ido.

¿Y ahora qué hacemos, dirá Gatokan?, porque a él lo del discurso político no le sale demasiado bien, y los que se han quedado a su vera son capaces de hilar un par de oraciones y poco más, que ya me imagino a los coordinadores de quinta expurgación afrontar el discurso con el “Rosa Díez dice” y la gente se termina aburriendo de tanta monotonía. Lo mejor será contratar a alguien, un buen equipo de periodistas pagados es la mejor opción para salir del apuro, también alguno que piense por sí mismo y unos cuantos creativos, porque eso es lo que hace Florentino con el Madrid y seguro que funciona, y además hay que hacerlo lo antes posible, porque aunque estemos en verano la gente compra periódicos, escucha la radio y hasta sigue viendo la tele, y además está lo de internet, que a esa cosa la carga el diablo de los laicos, que si no hubiera sido por internet, no hubiera pasado nada, dice el ínclito, para que los demás asientan, que él sabe que les gusta y se sienten mucho mejor, cuando les brinda la oportunidad de que admiren su sobrada inteligencia. Además, nadie va a enterarse, que está todo el mundo muy preocupado con la crisis, las vacaciones y el futbol.

Hay que alegrarse, porque ahora ya tenemos el partido a la medida, con gente leal a las personas que saben, que es lo que cuenta. ¿Para qué se necesitan militantes que piensen por si mismos?, para nada. Con los clones y otros clones que vayan llegando, y ella colgada del micrófono y el titular seguro que obtenemos con este partido de chiste unos resultados exuberantes, que desde que fuimos a la parada gay, tenemos asegurados los votos de los progresistas en general, los trabajadores de Garoña, las víctimas del terrorismo, y todos los despistados que podamos encontrar por el camino.

Ahora la estrategia es convencer para vencer y a eso, a Rosa no la gana nadie, que portento de política, que olfato para la noticia, ahora lo que tenemos que conseguir es el apoyo de los del cambio climático, la paz en Irak, y los del Nunca Mais, y por fin, Gatokan, podrá ser diputado a Cortes, y entonces se van a enterar los españoles de cómo se organiza un país en condiciones, porque es igual de fácil que construir desde la nada un partido estalinista.

Dónde se van a poder comparar Zapatero y Rajoy con la dialéctica suprema de Rosa Díez, que es capaz de venderle un traje de neopreno a un berebere para que se sumerja en las arenas del desierto o una nevera a una familia de esquimales en un iglú al que no ha llegado la electricidad, por si algún día llega. Nos van a enseñar a los que sabemos, esos disidentes de mierda. Anda ya.